Sin lugar a duda, Mesopotamia fue la cuna de la civilización y de todo lo que podría considerarse el inicio de la formación de la Humanidad. Etimológicamente se traduce como “entre aguas” o “entre ríos”, por su localización tan peculiar situada entre diversos flujos de agua. Mesopotamia, si se estudia la localización y se compara con la geografía actual, podría considerarse que fue lo que ahora conocemos como Irak. Esta antigua civilización comenzó a formar en sus entrañas diversas ciudades que debían protegerse de los ataques de los pueblos vecinos. Es por ello que surgieron los llamados Súmeros, quienes emplearon su intelecto para generar un gobierno, un ejército, y unos dioses propios. ¿Quieres conocer
los legados más importantes de Mesopotamia?
Museo de Mesopotamia, Irak.
Sin duda, uno de
los legados más relevantes de Mesopotamia es la escritura. O quizás el más importante, a partir del cual podemos comenzar a hablar de la historia tal y como la conocemos, estableciendo todo lo ocurrido anteriormente como prehistoria. En el famoso Templo de Mesopotamia fue donde se comenzó a originar la práctica de escribir, todo por la necesidad de dejar constancia de todos los trámites que se realizaban por el comercio. Todo comenzó mediante dibujos, pictogramas que representaban objetos y acciones de venta. Fue entonces cuando notaron lo laborioso que resultaba grabar cada objeto y cada acción, y por ello crearon un código de signos a partir de la representación de los sonidos. Grabados en arcilla, se creó el mayor de los
legados de Mesopotamia, la escritura.
A este arte milenario que hemos heredado, cabe incluir ciertas ciencias y técnicas utilizadas por los mesopotámicos para conocer mejor el mundo, el universo y la vida, constituidos como
los legados más relevantes de Mesopotamia y del mundo en general. La ciencia más importante, es sin duda,
las Matemáticas, que junto con la astronomía, es uno de lo máximo aportes culturales y científicos, transferidos por las antigua civilización griega. Las matemáticas surgieron como una inmediata necesidad de conocer los gastos económicos y toda la información acerca de la administración de los templos y palacios.
Por descontado,
uno de los legados más importantes que nos deja la civilización mesopotámica y que sigue estando vigente tal cual hoy en día, son las concepciones y los conocimientos jurídicos
. Es decir, el derecho sobre cómo se organizan los sistemas públicos y privados en los distintos ámbitos de la vida cotidiana. Los contratos escritos sobre tablas de arcilla nos han permitido conocer cómo se desarrollaron los acuerdos entre diversas partes, cómo se cumplían los préstamos y los traspasos de bienes, y cómo se organizaban los distinto segmentos jerárquicos que dirigían la ciudad. Así como también las diferentes propuestas ante situaciones conflictivas que solucionen los problemas que surgían. Todo un avance del desarrollo en lo que se refiere a evolución intelectual.
Otro de los
legados, un ámbito muy ligado a las matemáticas, es la Astronomía. Mediante esta práctica se predijeron una gran cantidad de eclipses de luna, se pusieron nombres a las constelaciones que hoy en día conocemos, y también se realizaron diversos descubrimientos acerca de las distintas fases por las que pasan los planetas de nuestra constelación. De la astronomía se creó también un Calendario, al cual se le añadía un mes extra cada 6 años.
Relieve de mosaico mesopotámico.
No cabe duda de que los mesopotámicos fueron el poblado más desarrollado y avanzado en cuanto a intelecto se refiere. Pero los
legados de Mesopotamia no solo se quedan en proyectos intelectuales, estudios sobre las ciencias y técnicas de administración, o la observación de los movimientos del universo para ver cuánto afecta a nuestro planeta. Es cierto que descubrieron 5 planetas más, lo cual es verdaderamente increíble. Pero sin embargo, los mesopotámicos fueron también pioneros en invenciones de gran calibre, que sin sus
legados, hoy en día no podríamos disfrutar de grandes avances. Estamos hablando, por supuesto, de la
invención de la rueda. Este revolucionario invento fue diseñado para que la agricultura tuviera un sistema de regadío mucho más sencillo y fácil.
Como ya se ha comentado anteriormente, los pueblos de
Mesopotamia rendían culto a varios dioses. Según la cultura politeísta, dichos dioses eran poderosos e inmortales, y siempre estaban relacionados con los diferentes fenómenos naturales o ambientales, y más tarde, tras el aprendizaje de la astronomía, se asociaban a los astros. Todos ellos tenían forma humana y se les rendía culto en los diferentes templos de las ciudades, a manos de los sacerdotes, que eran quienes se dedicaban a practicar las ceremonias de culto religioso y las ofrendas dándoles gracias por la vida que podían disfrutar.
Una vez conocidos
los legados más relevantes de Mesopotamia, cabe destacar al gran unificador del reino mesopotámico que llevó a su pueblo a la enseñanza. Hammurabi fue una de las figuras más destacadas de la cultura mesopotámica. Recopiló leyes, impuso castigos duros para los robos, agresiones y violencias familiares, entre otras muchas cosas. Otorgó a las mujeres el derecho a poseer sus propios bienes y estableció una jerarquía social en la que se designaban distintos cargos entre los que se encontraban los escribas, los militares, los funcionarios oficiales, o los esclavos y prisioneros de guerra. Estableció el matrimonio monógamo y el divorcio. Una gran cantidad de reformas, de leyes, de pautas a seguir para convivir civilizadamente que se vieron destruidas tras la muerte de este emperador. Una vez fallecido, el pueblo mesopotámico se vio invadido por los pueblos vecinos que arrasaron con todo lo que encontraron a su paso, haciendo que este magnífico imperio se viera asolado y derruido